Salmos 25:3. Reina-Valera 1960 (RVR1960)- 3 Ciertamente ninguno de cuantos esperan en ti será confundido; Serán avergonzados los que se rebelan sin causa.
Uno de los más hermosos regalos de papa Dios, es darnos la posibilidad de esperar en Él, sin ser defraudados. por ello debemos cultivar algunos aspectos que fortalezcan nuestra esperanza en el Señor, cada vez que esperemos algo en el señor, debemos visualizarlo en nuestra mente y hacerlo real en la oración, alimentándonos con sus promesas.
Aquella viuda que se caracterizó por (orar siempre y no desmayar, Lucas 18:1), nos muestra el ejemplo de lo que es la perseverancia en acción. Cuando esperamos en Dios, visualizamos lo que recibiremos como si ya lo hubiésemos recibido, y llamaremos las cosan que no son como si fueran.
Debemos alimentarnos de verdad, muchas de las esperanzas frustradas se han ocasionado por mentiras que nos hemos dicho. Erramos en conocer la voluntad de Dios, antes de alimentar una esperanza debemos buscar la verdad de Dios respecto a nuestro anhelo y asegurarnos que sea su voluntad.
Si esta seguro que lo que anhela es la voluntad de Dios, no desmaye; persevere hasta el final, pase por encima de toda voz extraña y dele crédito solo a la voz de papá Dios, quien siempre nos recuerda que ninguno de los que esperan en Él serán avergonzados.
Sin temor, póngale alas a sus esperanzas y déjelas volar por las alturas, presente sus anhelos y sueños al Señor, para que pueda ver las maravillas y milagros. !Cómo se goza nuestro padre, viéndonos contar con su ayuda en todas las cosas y en todo momento de nuestra vida!.
Bendiciones!!
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